ESCUELAS PARA CREADORES DE DEMOCRACIA

          La imposición de la democracia es su propia negación. Este pensamiento tan elemental ha sido constantemente olvidado por los gobiernos autotitulados “defensores de la libertad”. La libertad no es algo que alguien tiene que defender, sino que es el espacio creador que nace del corazón de cada ser humano. Para encarnarla tan solo hay que abrir un camino entre la maraña de creencias limitantes, que hemos ido sembrando en nuestras mentes a lo largo de toda la historia, y que  diversos modelos de enseñanza se han encargado de alimentar y engordar.
Los potenciales multicolores de nuestros
niños necesitan de ambientes democráticos
para poder convertirse en realidad.
            Un ingrediente fundamental en una educación holística es la democratización de las aulas y de las familias. Es absurdo estudiar las constituciones en los colegios y que luego estos ignoren  los valores democráticos en su funcionamiento. Durante siglos hemos recibido una educación que predica una cosa y actúa de otra manera, esta situación refuerza el valor de la mentira como forma de vivir. No puede haber auténtica democracia si no partimos de la verdad de lo que sentimos y de lo que pensamos.
            Un creador de democracia sabe que ésta sólo merece la pena si nos permite a cada uno ser nosotros mismos, y que en el fondo la democracia sólo tiene un enemigo: la mentira. El miedo es el alimento de la mentira, por eso, si logramos trascenderlo ésta muere de pura inanición. Una educación sin miedos es la mejor garantía para crear una sociedad democrática.
            A mucho os puede parecer utópica la existencia, hoy en día, de escuelas que se gobiernen democráticamente, en plano de igualdad entre alumnos y profesores, Sin embargo, hay muchas personas que durante años han estado construyendo este tipo de colegios. Como muestra un botón, os invito a leer esta entrevista a David  Gibble:
La libertad es el espacio creador que nace
del corazón de cada ser humano.
         ¿Qué os ha parecido…? Vivimos en un mundo en el que lo que no sale en los “grandes” medios de comunicación parece que no existe, es como si éstos tuviesen el privilegio de otorgar el sello de lo que es real y de lo que no lo es.
            ¿Os gustaría visitar una escuela con funcionamiento realmente democrático…? En ella los alumnos no solo son responsables de su propio aprendizaje, sino que también la gobiernan. Es real, aunque no aparezca en nuestros televisores. Tenemos a una guía de excepción: Adriana Bertrán, a quien conocí en un seminario de Noemí Paymal en Barcelona. Al empezar a trabajar como maestra, el contacto con los adolescentes le hizo pensar que merecían algo más, y decidió salir hacia donde no llegan los medios de comunicación y conocer e investigar, in situ y por su cuenta, nuevas propuestas educativasPara iniciar la visita basta que pinchéis en el link, ¡seguro que os sorprende!:
http://wwwvivencias12.blogspot.com/2010/09/sudbury-valley-school-la-encarnacion.html
    A pesar de no poseer nuestra sociedad un modelo de escuelas democráticas, el espíritu democrático ha salido a las calles y se ha encarnado en buena parte en el Movimiento 15 M. Tal vez no haya malas democracias, sino edades en las democracias .... Si te interesa esta línea de pensamiento te invito a ver el siguiente vídeo pinchando en el link:
http://vimeo.com/24075624



6 comentarios:

Anónimo dijo...

Felicitaciones por lo innovador del tema

Namasté dijo...

Precioso y preciso.
Muy ilustrativo, como de costumbre.

Belkis dijo...

Mas que sorprenderme, me halaga sobremanera que existan estas escuelas, ojalá y proliferen cada día más. Sería un avance para la humanidad.
Un abrazo Carlos.
Recién vuelvo de mis vacaciones

Evolet dijo...

Maravilloso blog!!

Lo encontré por casualidad. Ahora tienes a una seguidora más.

Un saludo!!

Ramon.Morata dijo...

Te voy siguiendo, porque nunca dejo de sorprenderme, de re-aprender.
Saludos cordiales.
Ramon

Anónimo dijo...

ummm, sí existen iniciativas como ésta en el estado español. Hay muchas experiencias de escuela centrada en el aprendiz, muchas que tienen parte de modelo sudbury y parte de modelo wild, y parte de muchas otras influencias. La que sí se describe a sí misma como sudbury es Ojo de Agua en Alicante, que lleva un buen rato funcionando.