¿POR QUÉ COMPETIR SI PODEMOS COLABORAR?

   Desde la escuela nos van inculcando la necesidad de competir, de estar mejor preparado que el otro, de ser más listo… Las notas mantienen la tensión para que no olvidemos esto. Se hace todo lo posible para sembrar la desconfianza entre los seres humanos. Difícilmente podemos imaginar el deporte profesional fuera de la competición. El progreso de un país se mide comparándolo con los demás. Incluso, buscar pareja se convierte en todo un arte de competir.
   Nuestra sociedad se ha hecho una experta en encontrar el camino más largo para lograr lo que quiere. Cuando competimos siempre hay un perdedor y, por lo tanto, es inevitable la frustración. Tal vez, esta sea la razón de la desilusión que se respira.    Lo que está claro es que competir es un mal negocio. Ésta es la opinión de Peter Joseph-así es conocido- y lo ha plasmado en un documental que invita a reflexionar sobre nuestro modelo de sociedad, su título: “Zeitgeist addendum” , que podríamos traducir como “Adicción al espíritu de la época”. En él se dice que nuestra necesidad de competir nace de la idea equivocada de que nuestros recursos son muy limitados; hecho que podría ser cierto antes de disponer de toda la tecnología actual y futura. Toda nuestra vida parece girar en torno al sistema monetario; los que lo manejan en la sombra están muy interesados en que las personas sientan la escasez de recursos. De esta manera, quedan encerradas en su victimismo y son fácilmente manejables. Este proceso conlleva la necesidad de pedir créditos constantemente, hecho que el sistema bancario aprovecha para crear un dinero ficticio,que no ha sido generado por ninguna actividad económica.
   En el documental podemos oír cosas como: “El sistema monetario está basado en que haya escasez de recursos porque, así, se puede vender a buen precio…El aire no se puede vender porque es muy abundante….La tecnología actual puede producir abundancia para todos….La escasez del sistema propicia la criminalidad…La guerra es inevitable en la escasez”
   ¿Te apetece verlo? Si es así, acomódate, tienes dos horas por delante… Pincha en lo siguiente y extrae tus propias conclusiones:
http://video.google.com/videoplay?docid=766097249993404708#docid=-4381889862027135531

   Un personaje muy curioso que interviene en el documental es el nonagenario Jacque Fresco, conocido como el Da Vinci de nuestra época. Se autodefine como ingeniero social debido a su gran interés en conseguir que la técnica sirva a todas las personas y no sólo a una élite. Ya en el colegio se negó a un acto patriótico alegando que él era ciudadano del mundo. Eduard Punset le hizo una entrevista en “Redes”, en torno a cómo se imaginaba las ciudades del futuro, si quieres verla pincha en la dirección siguiente:
http://www.youtube.com/watch?v=fcp3_TtheuQ&feature=related
   En su “Proyecto Venus” Fresco hace todo un alarde de imaginación en la aplicación social de la tecnología. Seguramente encontrarás algunos puntos de discrepancia con él, pero la pasión que pone al explicarlo despierta algo en nosotros… ¿quieres experimentarlo…? Pincha en lo siguiente y sumérgete en la mente de Jacque Fresco:
http://www.youtube.com/watch?v=9-BpE-0Y9Yo&feature=related
    En otro vídeo su colaboradora Rosanne Meadows nos explica cómo sería una sociedad en la que no hubiése necesidades que cubrir. La abundancia no sería cosa sólo de ricos. El vídeo termina con la frase de Josiah Warren siguiente: "Si la gente tiene lo que necesita deja de existir la política" Da qué pensar...¿no? Si quieres ver este minivídeo pincha en lo siguiente:
http://www.youtube.com/watch?v=_9DQwSv_rQA